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Manseng Noir: La hermana joven y amable del Tannat

A fines de 2023 la bodega Cerro Chapeu lanzó al mercado un nuevo vino bajo la innovadora línea Folklore de Castel Pujol.

La Bodega Cerro Chapeu presentó su más reciente creación: el Manseng Noir, un vino tinto elaborado con una cepa que, hasta hace cuatro años, solo se cultivaba en Francia y que llegó a Uruguay como una alternativa prometedora al emblemático Tannat.

Bajo la distinguida línea Folklore de Castel Pujol, este vino está despertando la curiosidad de grandes conocedores y amantes de la bebida por igual. A principios de noviembre de 2023, en el marco del proyecto Vitis vinifera Manseng Noir, la hermana del Tannat, la bodega invitó a amigos y prensa especializada a una exclusiva degustación comparativa para revelar los resultados de un análisis sobre la relación genética entre estas dos variedades.

Este proyecto, llevado a cabo en colaboración con la Facultad de Química y la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), no solo resalta la excelencia vitivinícola del país sino también la importancia de la investigación científica en la evolución de la industria del vino nacional. 

Francisco Carrau

En una conversación con Francisco Carrau, propietario y enólogo de la bodega Cerro Chapeu, descubrimos los motivos detrás de la introducción de la Manseng Noir a Uruguay en 2019. A lo largo de los años, desde su importación hasta la cosecha y vinificación, Carrau comparte sus experiencias y los beneficios que la Manseng Noir ofrece a la viticultura uruguaya.

¿Qué los motivó a traer la planta a Uruguay en 2019?

En la Facultad de Química trabajamos mucho el Tannat. Y en el 2013 nos encontramos con un estudio de cepas del Instituto Nacional de la Investigación Agronómica (INRA) de Montpellier, que reveló que la Manseng Noir es la pariente directa más cercana de la Tannat, siendo considerada su «hermana» al tener el 50% de su genoma igual. Este estudio, que abarca alrededor de 2500 variedades de uva, representa el análisis más exhaustivo hasta la fecha, aunque se estima que existen alrededor de 10 mil variedades en total.

Intrigados por esta información, en 2013 iniciamos la búsqueda de la Manseng Noir, hallando apenas dos hectáreas en toda Francia que al día de hoy ascendieron a 50 y son todas del mismo productor. Ante esta situación resolvimos obtener yemas a través de un viverista francés asociado al vivero de Montpellier. Así, en 2015, comenzamos el proceso de cultivo en su vivero en Francia, como vivero madre. Tras un periodo de cuatro años, en 2019, logramos traer a Uruguay 1500 plantas injertadas, equivalentes a media hectárea, que finalmente plantamos en Cerro Chapeu. Posteriormente, en setiembre de este año optamos por expandir nuestro viñedo, encargando más plantas para completar la totalidad de la hectárea planeada al comienzo de la investigación.

Este paso marcó el inicio de un proyecto que se materializó en la producción de los primeros vinos en 2021, pero hicimos pocos litros porque a las plantas jóvenes no les podés pedir muchos racimos. No fue sino hasta el 2022 que llevamos a cabo una vendimia más substancial de tres barricas y en noviembre del año pasado presentamos al mercado en una edición de solo 1000 botellas.

La Manseng Noir tiene la mitad de su genoma igual que la Tannat y no se asocia a ninguna otra variedad, entonces eso quiere decir que no conocemos al padre o a la madre. Uno de nuestros próximos objetivos es ver si los encontramos, porque en las 2500 variedades del estudio de Montpellier no está la información, así que tenemos que seguir buscando en otros lados.

¿En qué momento la ANII comienza a formar parte del proyecto?

En el año 2022, luego de completar la fase de importación y plantación, decidimos presentar nuestro proyecto ante la ANII, quien nos concedió un Crédito Fiscal que otorga a empresas privadas comprometidas con actividades de Investigación y Desarrollo. Tras evaluar nuestra propuesta nos brindó respaldo mediante beneficios fiscales. Este respaldo financiero incluye la devolución de impuestos y la emisión de certificados que facilitan en gran medida la viabilidad y expansión de nuestro proyecto. 

Nos presentamos junto con la Facultad de Química, donde llevamos a cabo análisis exhaustivos de aroma, color, taninos y polifenoles. Esta asociación adquiere mayor relevancia ya que el banco de datos de la facultad alberga el genoma completo de la variedad Tannat y ahora también toda la información sobre la Manseng Noir.

El proyecto se extiende desde 2022 hasta 2024 y terminará formalmente con la ANII en diciembre de este año. Aunque seguiremos trabajando con la cepa, es necesario tener al menos tres cosechas para validar cualquier proyecto agrícola con viñedos. Esta práctica considera las variaciones climáticas, del suelo y de los años, que inevitablemente afectan. Al evaluar un aspecto específico de la variedad durante tres cosechas, se reconoce su carácter distintivo y se garantiza la validez de los resultados.

A nivel organoléptico, ¿cuáles son las similitudes y diferencias entre la Tannat y la Manseng Noir?

Para hacer la comparación plantamos vides de Tannat y Manseng Noir muy cerca unas de las otras, en el mismo suelo, y empleamos un proceso similar de vinificación. El Manseng Noir, en términos organolépticos, se presenta como una opción complementaria al Tannat, enriqueciendo la oferta con matices distintivos. A pesar de compartir color y estructura, las diferencias clave se manifiestan en la menor graduación alcohólica y la menor astringencia del Manseng Noir, gracias a su proceso de polimerización. Esta particularidad suaviza el tanino de manera temprana, permitiéndonos cosechar uvas menos maduras, y reducir la necesidad de tiempo en barrica para destacar aromas y sabores naturales de la fruta. Por ende, la obtención de un vino con menor grado alcohólico y taninos más redondos y suaves ofrece una alternativa  atractiva para aquellos consumidores que buscan una experiencia fresca y equilibrada

¿Cuáles son los beneficios a nivel vitivinícola para los productores y bodegueros?

Tras mostrar una adaptación excepcional al Uruguay durante tres años consecutivos, la Manseng Noir se presenta como una opción prometedora para los productores en la región. Este potencial se debe a su relación genética con la Tannat, una cepa con resistencia histórica al suelo y condiciones climáticas húmedas y lluviosas de nuestro país.

Otro beneficio tangible radica en su destacada productividad, superando incluso al Tannat entre un 20% y 30% más. Este atributo es esencial para los viticultores y bodegueros, quienes comprenden la importancia de maximizar la producción sin comprometer la calidad. Además, su menor tamaño de hojas reduce la carga laboral en el viñedo, especialmente en el proceso de deshoje.

Y en cuanto al manejo enológico, los taninos naturalmente redondeados desde el viñedo permiten hacer vinos con poca incidencia de la barrica, implicando menores costos para los bodegueros y dando la posibilidad de producir un Manseng Noir en acero inoxidable y embotellarlo rápidamente simplificando el proceso y permitiendo una pronta disponibilidad en el mercado, lo cual es beneficioso tanto para la bodega como para los consumidores. Por ejemplo el Manseng Noir que lanzamos recientemente tiene apenas cuatro meses de barrica de segundo uso porque solo la utilizamos para clarificar el vino.

¿Por qué el Manseng Noir salió al mercado bajo la línea Folklore de Castel Pujol?

Porque llegamos a la conclusión de que era un vino raro que encajaba perfectamente en esa colección. La línea Folklore incluye vinos que surgen de experimentos con cepas menos conocidas y técnicas de vinificación alternativas, reflejando la innovación y la expresión única del terroir de Cerro Chapeu. La colección incluye un Pet Nat (80% Trebbiano, 20% Malvasía), un tinto (80% Tannat copigmentación con 20% de pieles de primera prensa de Petit Manseng), un Arinarnoa maceración carbónica, un naranja (90% Trebbiano, 10% Petit Manseng) y un blanco (70% Trebbiano, 30% Malvasía).

Estos vinos también forman parte de la familia de vinos naturales o sustentables, marcados por una mínima intervención desde el viñedo. La gestión se realiza sin herbicidas, reciclando pasturas naturales y utilizando ovejas en el proceso. Se emplean levaduras nativas y, al utilizar uvas de gran calidad los vinos no requieren aditivos animales ni sulfitos en todas las etapas, el Manseng Noir, por ejemplo, no contiene sulfitos en la molienda, se lo añadimos solo al embotellarlo.

Además, eliminamos las cápsulas de aluminio y plástico de esta línea, reduciendo así en un 10% la huella de carbono. También disminuímos 100 g de vidrio por botella, utilizando botellas ecológicas, lo que contribuye a la calidad sostenible del producto. Las etiquetas están hechas de papel reciclado, las tintas utilizadas por el ilustrador son orgánicas y el concepto general se centra en la mínima intervención.


¿Qué buscaron representar con la ilustración de la etiqueta?

A nivel general, las etiquetas de los vinos Cerro Chapeu hacen referencia a nuestro terroir, la tierra colorada, la flora y la fauna nacional. En la línea Folklore específicamente buscamos representar a los animales autóctonos que habitan alrededor de los viñedos de la bodega de la mano del artista Nicolás Sánchez, más conocido como Alfalfa. 


Ahora a la familia de la mulita, el zorrito gris, el venado de campo, el margay y la seriema se le suma una abeja con elementos humanos, que tiene manos en lugar de alas. Para nosotros esas manos representan a las personas que hacen el vino. Y la abeja simboliza la sanidad del ambiente. Es un insecto aliado al hombre hace miles de años y que hay que cuidarlo en regiones como Cerro Chapeu donde no se apliquen insecticidas. Nosotros alojamos cientos de colmenas en nuestras praderas naturales alrededor del viñedo porque son las polinizadoras fundamentales de las frutas silvestres y de las uvas que tenemos en el predio.

En algunas regiones del sur las abejas han sido afectadas por agrotóxicos, entonces este insecto entra dentro de la fauna que el proyecto Folklore busca proteger o rewilding

¿Cómo visualizás el futuro de la Manseng Noir?

En mi perspectiva, veo el futuro de la Manseng Noir como un vino tinto joven, frutal y sin barrica, que será altamente productivo y rentable para los bodegueros. Preveo que sustituirá a variedades como el Syrah, Merlot o Cabernet Sauvignon, que actualmente no cuentan con tanto respaldo.

Este vino, maduro y con capacidad de crianza, tiene el potencial de evolucionar de manera excepcional. Estamos observando su desarrollo y, para ello, guardaremos botellas específicamente para un seguimiento detallado.

La Manseng Noir se ha adaptado notablemente bien a Uruguay, caracterizándose por viñas saludables y prometiendo tanto cantidad como calidad de fruta. Aunque aún estamos en proceso de aprendizaje, con la Manseng Noir vislumbramos un amplio campo de posibilidades.

Nota por Lala Antunez

Fotos: Alvaro Gargilio, Gentileza de Bodega Cerro Chapeu

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